16 días de compromiso
Han pasado 16 días desde que Carlos me dio el anillo y el tema parece haberse apropiado de mi entorno. Todos mis conocidos ya lo saben y yo solo informe a mis tres mejores amigos. He sido discreta, sobretodo en el trabajo.
Recibí ya la llamada de cada una de mis tías y la amenaza de mis tíos de golpear a Carlos si se pasa de listo. Mi abuela ya me dio consejos sexuales y mi abuelo me envió un cheque.
Carlos y yo no hemos hablado mucho del tema, solo a veces me sonríe y sustituye mi nombre por “futura señora Rivas”. Mi suegra por otra parte me hace una llamada diaria para ajustar un punto de su muy completo plan para mi boda y mi mamá no deja de señalarme que yo debería ser la que tuviera un plan para mi boda.
¿Qué pasa con las bodas que enloquece a todo el mundo? Fue exactamente lo que pregunté a Lorena. Fui a tomar un café con ella anoche, ella es una de mis tres mejores amigos (¿recuerdas que los mencioné?).
Cuando le di la noticia de mi compromiso Lorena estaba muy emocionada, pero en estos 16 días parece que su cara se torna cada vez más fría, cuando le hablo de todo este asunto: de la boda, Carlos, mis suegros, mis papas, los preparativos, siento como si me escondiera algo. Opinó cada vez menos y ahora solo asiente a lo que yo digo.
Hoy tuve día complicado en la oficina y admito que en parte es por este asunto con Lorena. ¿Por qué estará extraña? ¿Qué sabe que no me puede decir? Pensé que la comunicación era lo más indicado para responder estas preguntas así que cuando llegó Carlos a recogerme al trabajo fui directa.
Carlos, ¿hay algo que no me hayas dicho?
Hay mucho que no te digo- me respondió riendo - x ejemplo el puesto de hot dogs al que voy se llama El perro con calor, jajaja. Pero si te refieres a algo importante, no, creo que sabes todo de mí.
¿Has hecho algo malo que por casualidad Lorena se pudiese haber enterado?
¿Qué? ¿A qué viene esto Fernanda?, ¿Lorena te dijo algo?
La respuesta correcta es no he hecho nada malo – repliqué molesta
¡No he hecho nada malo Fernanda! Te has estado portado muy rara.
Después de ese comentario fingí un dolor de cabeza y me fui sola a mi casa.
Han pasado 5 horas y Carlos aún no me ha llamado y no sé si es porque está molesto o porque se sintió atrapado. Hace un momento sonó el teléfono y lo conteste inmediatamente pensando que era él. Era Lorena, quiere verme con urgencia mañana después del trabajo. Cuando le pregunté acerca de lo que quería hablar me dijo:
Es sobre Carlos y todo esto de la Boda – no quiso decirme más por teléfono. Si va a decirme lo que me ha estado escondiendo por mí esta genial. Mejor ahora que después de una boda.
Por ahora tomaré el consejo de papá y me iré a dormir. Tal vez con la luz del sol las cosas se vean más claras.
